Con gran pesar acaba de llamarme Peter Cook desde el hotel donde se aloja en Valencia para comunicarme que no se encuentra bien y que le va a ser imposible impartir la charla que hoy debía de dar en la Universidad Politécnica de Valencia.
Nos pide que le disculpemos y me comenta que tiene que regresar a Europa a finales de año y que intentará visitarnos en esa ocasión.